Coaching, la transformación personal para mejorar las relaciones humanas
El crecimiento del coaching a nivel global ha sido impactante.Mientras en sus comienzos el coaching era una técnica exclusiva de las empresas para optimizar los resultados de sus Recursos Humanos, hoy en día todas las relaciones personales se encuentran atravesadas por esta metodología.
En la actualidad el coaching además de ayudar a fortalecer el trabajo en equipo en organizaciones empresariales o gubernamentales, es funcional a la gestión de las emociones en todo tipo de áreas y objetivos.
En este sentido, un estudio realizado por la Federación Internacional de Coach (ICF) concluyó que el 74% de las personas que acceden a servicios de coaching lo hacen con el fin de mejorar sus relaciones interpersonales, y especialmente en lo que respecta a saber comunicarse con el otro. Además, el ICF destaca que el coaching también es una herramienta buscada, en un 52%, por parte de profesionales que no se sienten satisfechos con su trabajo y es esta metodología la que les aporta las herramientas para fortalecer y gestionar el cambio.
También, el estudio determinó que el coaching es la técnica elegida para la búsqueda del equilibrio ya que para el 41% de las personas que se acercan a centros especializados en el tema lo hacen para poder conciliar armoniosamente distintos aspectos de su vida como la profesión y la familia, sin descuidar ninguno de estos ámbitos.
El crecimiento del coaching a nivel global ha sido impactante. En su aspecto asociado a la rentabilidad, suma 20 millones de dólares en el mundo y cuenta con un total de 47.500 coaches profesionales, de acuerdo a un informe publicado por la Federación Internacional de Coach.
Si bien existen distintas corrientes y metodologías de aplicación, en América Latina el coaching con mayor adhesión y repercusión fue el coaching ontológico que tiene su origen y sentido en la fusión de corrientes filosóficas con bases científicas y biológicas.
Es decir, el coaching ontológico, incluye los avances y últimos descubrimientos en el campo de las neurociencias con el objetivo de contribuir a generar un cambio positivo en las personas, las cuáles comienzan a educar y a gestionar sus emociones a favor de crear relaciones de calidad con sus semejantes, tanto en el trabajo, en la amistad, la familia y la pareja.
Entre algunas de las personalidades que aplicaron este tipo de técnica, se destaca Michelle Bachellet, quien en las dos semanas previas a la asunción de su primer mandato a la presidencia de Chile convocó a Julio Olalla, uno de los máximos referentes del coaching.
Así fue como los 80 funcionarios que conformaban su equipo de trabajo, ministros, secretarios e intendentes, formaron parte de un entrenamiento de tres días en los cuáles fueron capacitados en la gestión de los sentimientos que impactan en la extrema responsabilidad que implica estar al frente de la administración pública.
Primeros mandatarios, empresarios, familias y hombres y mujeres que desean optimizar sus emociones hoy encuentran en el coaching la herramienta eficaz para la transformación personal.