Desventajas de beber agua de garrafón

Actualmente existen purificadores caseros de grado profesional que replican la tecnología que utilizan las grandes embotelladoras del mundo.

El agua purificada es, quizá, el elemento más importante en un hogar, se utiliza para beber y también para cocinar. Una de las formas tradicionales de adquirir agua purificada es mediante la compra de garrafones, sin embargo, puede resultar contraproducente.

El uso de los garrafones se remonta hasta hace varios años, décadas de hecho. Quizás tus padres o tus abuelos utilizaron garrafones de vidrio para guardar agua purificada. Esta clase de garrafones mantenían el agua en buen estado y era complicado que se contaminara gracias a la misma composición del vidrio.

Sin embargo, se decidió dejar de producir esta clase de garrafones ya que, además de que resultaba más costoso elaborarlos, también eran más peligrosos pues, al estar hechos de vidrio, si se caían, se rompían, ocasionando varios accidentes.

También eran sumamente pesados, incluso sin estar llenos de agua, poco a poco la industria realizó la transición hacia los garrafones de plástico ya que se consideraban mas seguros y económicos de producir.

Pero, con el paso del tiempo se descubrieron algunas desventajas de utilizar estos contenedores durante periodos de tiempo prolongados.

Traslado

La capacidad de los garrafones de plástico es la misma que la de los garrafones de vidrio, son 19 litros de agua que son más que suficientes para una familia pequeña, aproximadamente si 4 personas necesitan el agua purificada, un garrafón durará cerca de una semana.

Después de ese tiempo es necesario comprar otro garrafón de agua lleno, estos se venden en las tiendas de conveniencia y es necesario cargarlos hasta tu lugar de residencia, muchas personas viven en departamentos, así que cargar estos pesados garrafones por las escaleras es demasiado cansado e incluso peligroso.

Existen garrafones más pequeños, pero resulta a veces muy poca cantidad para una familia pequeña, por ello la mayoría de las personas optan por garrafones de 19 litros para no realizar estos viajes con tanta frecuencia.

Poco estético

Los garrafones de agua son bastante grandes, por ello necesitan de un espacio considerable dentro de la cocina, existen diferentes despachadores para colocarlos, está el clásico que asemeja un columpio y donde hay que inclinar el garrafón para servir el agua.

También están otros como el despachador con llave en donde el garrafón se coloca boca abajo y el agua permanece en un depósito inferior.

Estos garrafones no están diseñados para ser bonitos o elegantes, están pensados para ser resistentes y prácticos, por ello casi nunca se ven bien en las cocinas, independientemente del estilo de esta.

Posible contaminación del agua

Esta es quizá la desventaja más importante que representa el beber agua de garrafón, si bien es cierto que producir plástico es económico, aun así, las empresas no reciclan inmediatamente los garrafones usados, solamente pasan por un proceso de limpieza, se vuelven a llenar y se envían al mercado de nuevo.

Se utilizan muchos químicos para crear el plástico, estos no son dañinos para la salud cuando no se utilizan demasiado tiempo, pero cuando el contenedor de plástico se reutiliza demasiadas veces, esos químicos pueden comenzar a contaminar el contenido.

Uno de los elementos más peligrosos para la salud es el Bisfenol A, mismo que podría resultar altamente venenoso para los humanos.

Alternativa a los garrafones

Actualmente existen purificadores caseros de grado profesional que replican la tecnología que utilizan las grandes embotelladoras del mundo, pero con un tamaño mucho más reducido, tanto que puede instalarse fácilmente debajo de la tarja de tu cocina.

Desde purificadores de carbón activado hasta un purificador de ósmosis inversa para casos en los que el agua potable contiene metales pesados.

Estos purificadores se conectan directamente en el suministro de agua potable que llega al hogar y purifican el agua, que no es segura para consumo humano, convirtiéndola al final en agua purificada completamente segura para beber, sin necesidad de comprar agua adicional a la que ya llega a casa.

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