El obóe de Carlos

Carlos Visnivetsky se marchó demasiado temprano.

Vocablo que proviene del francés: "Hautbois" (madera alta o aguda), instrumento musical cuyo sonido se caracteriza por una sonoridad dulce y expresiva, perdió hace escasamente una semana a su mejor ejecutante.

Carlos Visnivetsky se marchó demasiado temprano.

No hubo muchos avisos dando a conocer su muerte, sí los necesarios para remarcar lo que dejó en los otros: "Al reconocido vecino", "Al amigo entrañable", "Al músico del sentimiento", sirvieron para calibrar el peso de su partida.

Durante el corto proceso de la enfermedad que lo consumió, sólo guardó emoción y gratitud para con la hermosa familia que supo formar.

Alguna vez le comenté que me hubiera gustado aprender a tocar el obóe, en especial por la música barroca que tanto amo. No pudo ser. A mí me faltaba fuerza en los pulmones y a él... le faltó tiempo.

Me consta que era asiduo lector de este sitio.

Envuelto en su modestia, seguramente pensó que su positiva vida no era importante para llenar una página.

Queda - entre sus cosas - un estuche vacío. Quizás en un descuido nuestro, Carlos se llevó consigo el obóe para inundar de música la parcela de paz que hoy habita.

Redacción

 Síguenos en Facebook
 Síguenos en Twitter
 Síguenos en Instagram